martes, 26 de abril de 2011

Actos de extrema violencia y supuestos abusos sexuales a menores por parte de los Heraldos


Diputado Nelson Avila

Denuncian supuestos abusos a menores en secta religiosa

El grupo cuenta con 10 mil adherentes, dispersos en las ciudades de Santiago, Viña del Mar y Puerto Montt
Actos de extrema violencia y supuestos abusos sexuales a menores por parte de los "custodios" de la secta religiosa denominada Asociación de Nuestra Señora de Fátima, denunció ayer el diputado Nelson Avila.

La organización que contaría con un total de 10 mil adherentes dispersos en las ciudades de Viña del Mar, Santiago y Puerto Montt, cometería actos de extrema violencia y violaciones sexuales contra adolescentes que son atraídos al grupo.

Así lo indicó uno de los afectados, de 16 años -que declinó entregar su identidad- quien relató que uno de los denominados "custodios" lo agredió sexualmente en la sede que el grupo posee en Viña del Mar y que está ubicado en Villanelo Alto, en las cercanías de la población Empart.

El joven y su madre anunciaron que se interpuso un recurso legal en contra de Felipe Lecaros, quien sería el máximo dirigente a nivel nacional de esta agrupación (y actual responsable de los Heraldos del Evangelio en Chile).

Avila, por su parte, informó que en los próximos días se reunirá con autoridades civiles y con el arzobispo de Santiago, monseñor Francisco Javier Errázuriz, para que se adopten las medidas correspondientes.

"TRABAJO APOSTOLICO"
 
La secta, según la madre del afectado, recluta menores en distintos colegios del sector oriente de la capital a través de lo que denominó, en forma irónica, "trabajo apostólico", para luego invitarlos a vivir con ellos en los diferentes recintos con que cuentan.

En el caso del menor agredido, él participaba de las actividades del grupo en una de las residencias, ubicada en Américo Vespucio #250 (sede oficial de los Heraldos del Evangelio y de la TFP en Chile), en la capital. El menor denunciante indicó que los "custodios" lograban "lavar los cerebros", a través del gancho de las enseñanzas doctrinarias de la Virgen de Fátima y la práctica de diversas actividades deportivas.

A esto se refería con las prácticas y costumbres que se enseñaban en dichos lugares, y que el diputado Avila señaló como incitaciones a que los niños tomen determinaciones autónomas en relación a sus padres.

De esta forma, los encargados de dichos centros calificaban como "herejía blanca" cualquier muestra de sentimientos hacia los familiares, finalizó el parlamentario.


Año 174 - Nro. 59561 - Jueves 25 de enero de 2001

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