Al pedido de un lector animado por las informaciones dadas por nuestro blog, le comunico otros datos sobre la “vida escondida” de RAFAEL IBARGUREN, o sea, su “experiencia misionera” en Francia.
En este artículo, se describe cómo los grupos de derecha intentan extender sus influencias en Francia utilizando métodos llegados de los Estados Unidos. Por cierto, esos grupos se ponen en competencia ya que lo importante no reside en el mensaje sino en la cantidad de personas supuestamente convencidas por el mensaje.
RAFAEL IBARGUREN se dedicaba en la TFP de Francia al direct-mailing, es lo que dice su sobrino, Alfonso Beccar Varela, quien lo visitó en la casa de la TFP en Reuilly.
El artículo explica como funciona el direct-mailing utilizado por los grupos de derecha en los Estados Unidos y en Francia tomando como pretexto para llenar su libreta de direcciones la lucha contra la inmoralidad. Se explica también que la TFP no era del agrado de los Obispos de Francia. De hecho, la TFP entabló juicios en contra de dos diócesis de Saint-Bernard y de Annecy en el periodo en que RAFAEL IBARGUREN estaba en la TFP de Francia.
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En los años ochenta, los grupúsculos de derecha deciden jugar al máximo la tarjeta del grupo de presión “por abajo”. Su método de movilización reside sobre un bluf : pretender personificar la mayoría silenciosa que de ordinario no se expresa, organizando campañas espectaculares ignorando el número real de participantes. Encuentran su arma total. Es proporcionada por el otro fundador de la derecha religiosa: Richard Viguerie, inventor del direct-mailing. Además de poder lograr a mucha gente en poco tiempo gracias a una puesta financiera inicial recogida en los pasillos del Think Tank, la gran novedad del direct-mailing es que se produce no en nombre de una posición de autoridad, como puede sola hacerlo en Francia la Iglesia Católica, sino pretende ir desde la base, o sea, desde la América o Francia profunda. Su principio se basa en una distinción querida por la Acción francesa entre país legal (aquél dónde se hacían leyes contrarias a la moral) y país real (aquél que pretenden personificar los movimientos que se producen en nombre de la mayoría silenciosa). Lo que importa, es el efecto masivo de los bolsos de correo que llegan en un Ministerio o la saturación de una central telefónica, y no el hecho de que tantas personas hayan tomado el riesgo de juntar su nombre a una petición (…).
En Francia, la técnica del direct-mailing (…) ha sido utilizado por tres asociaciones: la Alianza para los derechos de la vida de Christine Boutin (a través de los Enlaces para la vida), Droit de Naître (Derecho a nacer) y Avenir de la Culture (Futuro de la Cultura).
Pero la influencia más nítida en cuanto al direct-mailing y otros métodos americanos se refiere Avenir de la Culture (Futuro de la Cultura) y a Droit de Naître (Derecho a nacer). Ya es menos sorprendente que las dos últimas asociaciones son inspiradas por la misma organización brasileña TFP (Tradición, Familia, Propiedad) (…).
El episcopado francés ve mal al TFP, en particular, porque uno de sus miembros organizó un atentado contra el papa Juan-Paul II. Como le es imposible reclutar bajo este nombre para el público cristiano francés, elige establecerse en Francia bajo el nombre de Avenir de la Culture en abril 1986. Presidida por Luc Berrou, ADC declara entonces tener por objetivo: “la promoción, el desarrollo, la protección y la defensa del patrimonio cultural europeo y occidental; la asistencia a la infancia martirizada y su defensa; la lucha por todos los medios legales, incluidas acciones judiciales, contra todo ataque a los valores cristianos (blasfemo, sacrilegio, etc.), a las buenas costumbres, al pudor, a la moral pública o a la moral natural”.
La acción que lanza verdaderamente Avenir de la Culture, y le garantiza facilidad financiera, es el “plebiscito TV”, una acción transferida de la campaña americana contra la perversión de las costumbres en la televisión. La campaña empieza con ayuda de unas cuatro páginas explicativas de la acción, un sobre respuesta y una papeleta de voto, constituida por una hoja A5 anverso y reverso, doblada en dos. Sobre el boletín, los participantes a la movilización pueden hacer muescas en tres casillas: “Sí, estoy de acuerdo con ustedes para denunciar la degradación moral de la televisión”, “No, la televisión está bien muy como es” y “Voto blanco ya que soy insensible a este problema”.
Con esta acción, ADC hace sacar la mayoría silenciosa francesa del bosque y permite la constitución de una base de datos que sirve todavía hoy en las campañas de la organización. Bajo la papeleta de voto, figura una solicitud de contribución: “adjunto mi contribución para extender este plebiscito a toda la Francia y sanear la televisión” y una orden de pedido de boletines. Al reverso, el elector puede dar siete direcciones de amigos. La acción es un éxito desde el punto de vista de la cosecha de datos: 50.000 signatarios llamados “manifestantes " por la asociación. Desde entonces, Avenir de la Culture no dejó de hacer oír su prosa excepcionalmente virulenta y extrema recurriendo a esta misma técnica americana del direct-mailing. Se especializó en las campañas contra toda forma de propaganda de información susceptible de pervertir el modelo y los valores que los mayores de la comunidad desean transmitir a los más jóvenes, lo que pasa generalmente por toda información que se refiere a la educación sobre la sexualidad, el aborto o la homosexualidad. Las campañas que predicaban el uso del preservativo y los programas de televisión que abordaban la homosexualidad contaron entre sus primeros objetivos.
Después de haber hecho retirar de la antena algunos programas, registra un franco éxito a principios de 1992 contra una campaña sobre la contracepción en dirección de los colegios y los liceos propuesta por Véronique Neiertz, secretario a los derechos de las mujeres. Pierre Bérégovoy, que había dado el visto bueno, retrocede, vuelve de nuevo sobre su compromiso y llega incluso hasta declarar: “Debemos juntos proseguir su rectificación moral, Francia nos lo pide”. La técnica de la mayoría silenciosa funcionó perfectamente, se abandona la campaña.
Fomentada por tal éxito, Avenir de la Culture sigue sus campañas. Después de múltiples artículos que se oponen a la lucha contra el SIDA, la asociación se ataca de frente al “Sidaction de vergüenza” que, “bajo pretexto de lucha contra el SIDA” sería “un incentivo masivo al vicio, una repugnando apología de todas las perversiones sexuales, e incluso, una menor banalización de la droga”. El 4 de mayo, algunos días antes de su programación, una delegación se vuelve al Ministerio de Cultura, para volver a poner una petición de doce mil signatarios (…).
Extrañamente, mientras que tales apoyos podrían valer a Droit de Naître et Avenir de la Culture un determinado prestigio para las asociaciones provida francesa, no es el caso. Al contrario, las dos organizaciones bajo influencia del TFP permanecen muy marginalizadas en Francia. Ciertamente, las asociaciones provida próximas al Vaticano le acusan seguramente ser vinculadas a una secta brasileña cuyo militante quiso asesinar al papa pero parece también que las asociaciones antiaborto francesas ponen un punto de honor en no confundir “influencia americana” y “tutela americana”.
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Como lo demuestra el informe de la Comisión Interministerial sobre las Sectas en Francia, este sistema de direct-mailing ha enriquecido la Tradición Familia y Propiedad en Francia a tal punto que pudo comprarse un castillo de un valor de 5.000.000 de francos franceses en 1991.
Como les demostraré en otro post, a continuación de la TFP, los Heraldos del Evangelio siguen usando esta técnica para vender medallas milagrosas y busto de la Virgen.
Fuente : VENNER Fiametta, L'internationalisation comme espace de radicalisation de la droite radicale française,2002 (http://www.afsp.msh-paris.fr/archives/congreslille/pdflille/tr4venner.pdf)
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